Edificios conectados con el paisaje, que aprovechan los recursos del entorno y no derrochan energía son la tendencia dominante de los últimos años. La arquitectura sostenible viene pisando fuerte impulsada por la necesidad de frenar la evidente degradación del medioambiente.
La construcción consume casi la mitad de los recursos. El 16% del agua, 35% de la energía, la mitad del peso en materiales extraídos del planeta. Prácticamente la mitad de los residuos de los vertederos proviene de la arquitectura, así como el 25% de las emisiones de gases de efecto invernadero.
El activismo social, algunos arquitectos y ciertas políticas han puesto en marcha la rueda de la construcción de los edificios verdes. «Se acabó el derroche, y toca responder a ese reto. No sé si es bueno o malo, pero es lo que hay. Hay que ahorrar energía y dinero. Hacer arquitectura verde. Ahora todo tiene que ser verde. Y es real, porque si no estamos muertos», decía el encumbrado arquitecto Frank Gehry en una entrevista.
Esta casa solar ecológica, en Montreal, diseñada por estudiantes para un concurso, resume en una imagen los principios de la arquitectura sostenible:
La rueda acaba de empezar a rodar. Son contados los ecoedificios. En este enlace os mostramos otros 6 edificios sostenibles que os sorprenderán.
Un ejemplo en España es ‘La Vela’, la sede de BBVA, en Madrid. La torre con forma elíptica, de 93 metros de altura y 19 plantas, proyectada por los arquitectos suizos Jacques Herzog y Pierre de Meuron. La construcción tiene el certificado LEED Oro, el estándar de construcción sostenible más exigente. Los materiales utilizados tienen bajo impacto ambiental, las luces son automáticas y se adaptan a las necesidades lumínicas del momento, los techos tienen una alfombra de vegetación, aprovecha todo el agua de lluvia y recicla el 100% de los residuos, entre otras muchas virtudes sostenibles.
En esencia, la arquitectura sostenible es una vuelta a los orígenes. Los persas diseñaron torres de viento que aprovechan las corrientes de aire para ventilar y refrescar edificios. También construían algunas habitaciones bajo el nivel de la tierra para que permanecieran frescas en los días calurosos. De igual manera los ecodiseños actuales controlan la humedad y temperatura con este tipo de decisiones arquitectónicas. Como ‘La Casa Crisálida’ diseñada por Mauro Lomba. Tiene un revestimiento de arlita que logra que funcione como un botijo reteniendo la el frescor.
La generación de energía mediante renovables es otro de los puntos imprescindibles para hacer un edificio sostenible. La luz se aprovecha con amplias cristaleras y paneles solares. Si el edificio está ubicado en un lugar ventoso, cabe la posibilidad de instalar un generador eólico. Para calentar agua se pueden usar calderas de biomasa.
Los ecoedificios intentan usar materiales que puedan ser reutilizados o reciclables. También elementos que proporciona la naturaleza extraídos y procesados de una manera respetuosa. En este vídeo podéis ver la idea del arquitecto Carles Oliver. Propone construir viviendas usando un aislante natural a base de posidonia, una planta marina abundante en la zona.
El uso de determinados materiales reciclados como vidrio, plásticos o aceros, la integración en el lugar, una redefinición completa de la relación del usuario con la naturaleza y con sus ritmos son algunos de los conceptos sostenibles que caracterizan al equipo de arquitectos RCR . Por ello este año han ganado el Premio Pritzker, el más importante del mundo en arquitectura. Lo componen los arquitectos catalanes Rafael Aranda, Carme Pigem y Ramón Vilalta, que explican su concepto de la arquitectura en este vídeo:
Nature from The Pritzker Architecture Prize on Vimeo.
La conciencia ecologista ha despegado con fuerza en distintos momentos de la historia y por motivos dispares. Hoy renace con fuerza la conciencia ecologista para combatir los evidentes cambios del paisaje por el cambio climático y el agotamiento de los recursos. Los edificios sostenibles son la manera con la que nuestra generación quiere reparar el abuso y reconectar con la naturaleza.