Estás en: ›› ›› Start-ups verdes: 10 tendencias para el emprendimiento ecológico

Start-ups verdes: 10 tendencias para el emprendimiento ecológico

En anteriores artículos ya hemos hablado de la importancia y contribución del empleo “verde” a la economía global. Expertos reunidos en el 17 Foro Europeo de la Eco Innovación de Lyon determinaron que, sólo en Europa, el número de empleos verdes creados en la última década asciende a los 4 millones. En España, según la Fundación Forum Ambiental, hay cerca de 8.000 empresas del sector del medioambiente, representando el 3,6% del PIB estatal y generando más de medio millón de trabajadores “verdes”.

Desde hace tiempo convivimos con nuevos modelos de empresas. Compañías pequeñas, innovadoras, nuevas formas de construir proyectos…Un ejemplo son las startups, una empresa de nueva creación con un modelo de negocio innovador, escalable y con altas posibilidades de crecimiento. Término asociado comúnmente a empresas jóvenes con un componente tecnológico alto, en la actualidad este término es perfectamente aplicable a otros sectores, como el medioambiental. Las startups “verdes”, además de buscar la rentabilidad, trabajan para mejorar la sociedad presentando soluciones que contribuyan a paliar los problemas ambientales del siglo XXI.

Emprendimiento

10 tendencias globales en el emprendimiento verde

El State of Green Business Report 2017 editado por el medio de información ambiental Greenbiz y la consultora Trucost identifica 10 tendencias de negocio “verde” para los próximos años.

  1. Blockchain:

    Una tecnología que fue el germen de la moneda virtual bitcoin y que sirve para el control de la trazabilidad de cualquier materia física o virtual de forma transparente. Esta tecnología, que está entrando con fuerza en el entorno financiero, se empieza a utilizar para la gestión de cadenas de aprovisionamiento o la certificación de procedencia de la energía.

  2. Materiales avanzados para un mundo circular:

    Existe una necesidad creciente de nuevos materiales basados en economía circular y baja en carbono. Bioplásticos a partir de componentes naturales, materiales de construcción recuperados o fabricación de ropa a partir de residuos son algunos de los ejemplos.

  3. Los Objetivos de Desarrollo Sostenible como estrategia empresarial:

    17 objetivos definidos por la ONU para el periodo 2015 y 20130 que a su vez cuentan con acciones concretas. Y ya hay compañías que alinean sus objetivos empresariales con uno o varios de estos objetivos.

  4. Acceso al agua:

    Agua de calidad y en cantidad para todos, un objetivo que requerirá grandes inversiones los próximos años, desde la reutilización y el reciclado del agua hasta las mejoras en las infraestructuras de distribución, saneamiento y tratamiento.Emprendimiento

  5. Energía limpia corporativa:

    Grandes multinacionales como Ikea, Google, Microsoft o Walmart se han comprometido con la transacción a una economía baja en carbono mediante el abastecimiento energético basado 100% basado en energías renovables.

  6. Responsabilidad ambiental empresarial:

    El 80% de las 500 compañías calificadas por Standard & Poors hacen públicos sus informes de sostenibilidad, tendencia que parece imparable al verse reforzada por el acuerdo de París. Algunos mercados bursátiles obligan a disponer de planes de transparencia ambiental a las compañías que deseen cotizar en ellos.

  7. Invertir en la cadena de aprovisionamiento:

    Utilizar modelos de negocio sostenibles en la industria textil, forestal o alimentaria global beneficia a todos los miembros de la cadena de valor: los pequeños productores ven mejorada su forma de vida, los distribuidores mejorar la calidad y la seguridad de sus productos y se reduce la volatilidad. Otra línea de trabajo se basa en la reutilización de materiales, residuos y materias primas secundarias para otros procesos.

  8. Movilidad y nuevos paradigmas de transporte:

    La popularización de los vehículos eléctricos, el aumento de la investigación en el campo de los vehículos autónomos o servicios basados en el concepto de la economía colaborativa que permiten reservar vehículos de uso compartido con el teléfono móvil.

  9. Nuevos medios de difusión de la sostenibilidad:

    Aprovechar las tecnologías existentes o incluso la realidad aumentada para hacer una divulgación de las estrategias de sostenibilidad para todos los públicos, evitando complejos informes, números y estadísticas. Google, por ejemplo, está invirtiendo millones en ayudar a organizaciones a usar las imágenes satelitales de Google Earth para notificar cambios en las condiciones del planeta.

  10. Resiliencia como estrategia de sostenibilidad:

    Una organización resiliente es aquella capaz de sobreponerse a las adversidades, adaptarse al cambio y estar preparada para lo que pueda surgir en el camino. Movimientos con el 100 Resilient Cities ayudan a áreas urbanas amenazadas por subidas del nivel del mar a desarrollar planeamientos urbanísticos y protocolos de emergencia.

A la vista de este decálogo, queda claro que hay un campo de trabajo muy extenso para el emprendimiento “verde”. El lanzamiento de medidas como el paquete de trabajo de Economía Circular de la Unión Europea es un ejemplo de fomento de este tipo de iniciativas, necesarias para acelerar la transición a un modelo económico bajo en carbono y respetuoso como el medio ambiente. Si hace unos años podíamos hablar del ‘boom de las tecnológicas’ el futuro anticipa grandes posibilidades para las startups verdes.

Mostrar comentarios (0)