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La gran travesía de Ellen MacArthur hacia la economía circular

En artículos anteriores de Hablando en vidrio hemos tratado el concepto de economía circular. Esta tendencia aboga por un nuevo modelo económico inspirado en el ciclo de vida natural frente al modelo lineal actual, claramente insostenible, basado en el consumo indiscriminado de recursos y la generación de residuos. En este post hablaremos sobre una mujer, Ellen MacArthur y de un viaje en barco en solitario alrededor del mundo que inspiró toda una filosofía global.

“Lo que aprendí viajando sola alrededor del globo”

En 2005, con menos de 30 años, la británica Ellen MacArthur (@ellenmacarthur) se embarcó en una gran aventura: ser el navegante en solitario que diera la vuelta al mundo más rápido sin paradas.

Debido a la configuración de los continentes, navegar alrededor del mundo requiere enfrentarse a retos climáticos extremos, como surcar la Antártida, y a condiciones de navegación adversas como las habituales en los temidos cabos de Hornos y Buena Esperanza. Todo esto en completa soledad y al cargo de un trimarán de 23 metros de eslora y 18 de manga.

Ellen MacArthur trimaran
Ellen MacArthur a bordo de su trimarán B&Q/Castorama (imagen vía BMT)

Ellen batió el récord previo, fijado en 73 días por el marinero francés Francis Joyon, en 1 día, 8 horas, 35 minutos y 49 segundos. Pero hay algo mucho más allá de esta proeza:

 

 

“Es difícil de explicar, pero tu forma de pensar cambia completamente cuando el barco es tu mundo y todo lo que llevas encima es lo que cargaste en el puerto (..) Hay que gestionar y aprovechar hasta las últimas migajas de la comida. Ninguna experiencia en mi vida podría haberme explicado de forma tan clara el concepto de “finito”: lo que tenemos ahí fuera es lo que tenemos, no hay más (..) Fue como si todos los puntos se conectaran: la economía global no es diferente, depende de materiales finitos que se consumen y desaparecen”.

 

Inspirada por esa visión, Ellen MacArthur emprendió un nuevo viaje de aprendizaje y conocimiento, quería comprender los mecanismos que mueven la economía actual y, para ello,  se entrevistó con economistas, doctores y profesionales en todo el mundo. MacArthur llegó a dos conclusiones principales: la economía lineal de los últimos 150 años, basada en el “usar y tirar”, no tiene futuro en un planeta donde los recursos son limitados y, para solventar esta carencia, es necesario apostar por modelos de crecimiento inspirados en la naturaleza, donde todos los materiales tienen una utilidad y se reintegran en el proceso de forma circular e infinita.

modelo economia circular fundacion ellen macarthur
Flujos de materiales y energía de un modelo económico circular (vía Fundación Ellen MacArthur)

 

Con esta motivación, creó la Fundación Ellen MacArthur en septiembre de 2010, actualmente la máxima promotora independiente de la economía circular. La Fundación remarca no sólo la necesidad de un cambio de paradigma sino que, además, cuantifica los beneficios de la transición de un modelo de crecimiento basado y desarrollo basado en los principios de la economía circular.

 

Economía circular en el sector del vidrio

La industria del vidrio es un buen ejemplo de aplicación de las teorías de la economía circular a la cadena productiva. Los envases de vidrio consumidos se recolectan de forma separada, se tratan y clasifican en plantas de reciclaje para obtener pequeños fragmentos llamados calcín que constituyen la materia prima necesaria para la fabricación de nuevos envases.

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“Cerrando el círculo”, economía circular de vidrio (vía Ardagh Group)

 

Según un estudio reciente de la Asociación Nacional de Empresas de Fabricación Automática de Envases (ANFEVI), cabe destacar la contribución medioambiental, social y económica del sector. Sólo en España, el sector del envase de vidrio genera 10.900 puestos de trabajo directos y más del 60% de la materia prima que emplea proviene del reciclado. La proximidad de los proveedores de materias primas ayuda de forma significativa a reducir los consumos energéticos derivados del transporte y a dinamizar la economía local.

 

Las conclusiones de ANFEVI coinciden totalmente con las tesis defendidas por la Fundación Ellen MacArthur. Los retos de la sociedad de consumo obligan a pensar de forma diferente y a poner en práctica nuevas soluciones a problemas reales, como pueden ser la demanda de materiales o energía en procesos de fabricación. La economía circular es la respuesta, al proporcionar un nuevo marco de producción y unas reglas de juego globales que aportan beneficios integrales en la dimensión social, económica y ambiental.

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