Cuando hablamos de jerarquía de residuos nos referimos a la prioridad de tratamiento que debe recibir un residuo. De forma gráfica, se suele expresar con una pirámide ordenada desde la forma de gestión más recomendable, la prevención de la producción de residuos, hasta la menos recomendable que consiste en la eliminación del residuo por vertido o incineración.
La prevención consiste en un conjunto de técnicas y medidas relacionadas con el ecodiseño para reducir la cantidad de residuo y sobre todo, su impacto medioambiental, así como el ahorro de materiales durante todo el ciclo de vida del producto.
Estos conceptos son también la base para la estrategia de las 3R, Reducción, Reutilización y Reciclaje. De ahí la idea de que el mejor residuo es el que no se genera o si echamos mano del refranero, “Más vale prevenir … que verter”.
La prevención a nivel europeo y estatal
En el caso europeo, la reducción y minimización de residuos es parte fundamental de la Directiva Marco 2008/98/EC de Residuos que, en su artículo 29, establece la obligatoriedad de elaborar programas específicos de prevención de residuos a los estados miembros.
Para hacer un seguimiento eficaz de la evolución de los planes de prevención, la Agencia Europea del Medio Ambiente (EEA) publica, desde el año pasado, un informe sobre prevención de residuos basado en los planes presentados por los estados miembros de la UE incluyendo Islandia, Liechtenstein y Noruega.
Este informe, publicado en diciembre de 2014, muestra que 18 de los 31 Estados han elaborado programas de prevención aunque establece que la comparación entre unos y otros es difícil. Esto se debe a que hay importantes diferencias en los ámbitos de actuación, los objetivos o las métricas de cada uno de los planes. El estudio pone de manifiesto también la importancia que dan estos planes a las acciones de concienciación y educación ambiental.
En cuanto a España, el Consejo de Ministros aprobó el Programa Estatal de Prevención de Residuos 2014-2020 que establece un objetivo general de reducción del 10% de la producción de residuos para el año 2020. El programa se articula en torno a cuatro líneas estratégicas: reducción de la cantidad de residuos, reutilización y alargamiento de la vida útil de los productos, reducción del contenido de sustancias nocivas y reducción de los impactos adversos sobre el medio y la salud humana de los residuos generados.
Estrategias de prevención y ecodiseño en la industria del vidrio
Además de garantizar el reciclado de los residuos de envases de vidrio, Ecovidrio trabaja desde el origen en colaboración con las empresas adheridas en materia de prevención. Para ello, la entidad ha desarrollado Planes Empresariales de Prevención (PEPs) específicos para los sectores que distribuyen sus productos en envases de vidrio, como son el de cervezas, sidras y vinos y bebidas espirituosas, entre otros.
Estos planes se basan en cuatro líneas de actuación:
- Reducción del peso de los envases de vidrio
- Incorporación de material reciclado en los envases y embalajes utilizados
- Mejora de la calidad ambiental de los envases y sus posibilidades de valorización
- Adopción de buenas prácticas en la gestión interna de los residuos de envases
Desde 1998 las empresas adheridas a Ecovidrio han puesto en marcha más de 6.000 medidas de prevención por medio de los Planes Empresariales disminuyendo en un 10,7% la relación entre envase y producto y consiguiendo una reducción del peso de los envases de vidrio considerable.
En 2013, 256 empresas se han adherido a los Planes Empresariales de Prevención de Ecovidrio, adoptando 87 medidas de prevención y ecodiseño para la fabricación de envases más sostenibles.