Ha pasado de no más de 80 ejemplares a unos 370 en unos 25 años. Gracias a las medidas de recuperación, el oso pardo está consiguiendo salvarse de la extinción a la que parecía abocado. En este artículo se explican las claves, y cómo evitar posibles conflictos con estos mamíferos.
El oso pardo cantábrico se está salvando de la extinción
La población de osos pardos (Ursus arctos) en la Cordillera Cantábrica continúa en peligro de extinción, pero ya no se encuentra en situación crítica. Si en la década de los 90 del siglo pasado quedaban no más de 80 ejemplares, en la actualidad se estima que hay 370, 250 en la subpoblación occidental y 120 en la oriental. Así lo señala un reciente estudio realizado por las comunidades autónomas de Castilla y León, Galicia, Asturias y Cantabria, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y el Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (CSIC-UCLM-JCCM).
En concreto, se estima que existen en la actualidad unos 210 machos y 160 hembras. La comunidad autónoma que más osos pardos alberga es Castilla y León, con unos 197 (108 en el occidente leonés y 89 entre el oriente de León y la Montaña Palentina). Le sigue Asturias, con 135 en el núcleo occidental; Cantabria, con 31 en la población oriental; y Galicia, con 11 en el núcleo occidental. Este aumento ha supuesto que algunas zonas hayan vuelto a recuperar al oso pardo, en concreto las provincias gallegas de Lugo y Ourense, y la zona norte de la provincia de Zamora.
El estudio comenzó a realizarse en 2020 y se han muestreado 16.700 km2 de superficie mediante la técnica SCR de análisis . Se trata del sistema más utilizado en la actualidad para estimar poblaciones de especies amenazadas al ser la menos invasiva (no requiere capturas físicas para su marcaje).
Claves en la recuperación del oso pardo en la Cordillera Cantábrica
El estudio demuestra que las acciones de conservación de los últimos 25 años han dado sus frutos. En concreto, según los expertos de la Fundación Oso Pardo, una ONG que trabaja desde 1992 para la recuperación de la especie, tres claves explican este éxito:
- Evitar la caza ilegal: Aunque se trataba de una especie protegida, en los años 90 la caza furtiva consiguió que casi se extinguiera. Por ello, la primera medida más necesaria y apremiante fue ponerle freno a estas prácticas ilegales.
- Protección de su hábitat: La aprobación de distintas figuras legales para la conservación de los espacios naturales donde vive el oso pardo fue también esencial. En este sentido, la Red Natura 2000, el sistema de protección de la naturaleza de los Países Miembros de la Unión Europea (UE) ha contribuido en gran medida a ello.
- Implicación de la población local: Sin la concienciación de las instituciones y los habitantes de las zonas donde coexisten con los osos pardos no hubiera sido posible la aplicación de las medidas de recuperación y conservación.
Cómo evitar conflictos con los osos pardos
A medida que el número de ejemplares de oso pardo aumenta, las posibilidades de que surja algún conflicto con ellos también. En concreto, los expertos señalan el riesgo creciente de que se acerquen cada vez más a los pueblos y las ciudades en busca de alimento.
Por ello, las instituciones creaban en 2019 un Protocolo de Intervención con osos en la Cordillera Cantábrica para facilitar la coexistencia del oso pardo con las actividades humanas, como la apicultura, mediante la “adecuada compensación de los daños ocasionados”. Otra de las actuaciones es tratar de disuadirles sin causarles daños cuando se detecta a alguno de ellos para que no vuelvan a intentar acercarse. Asimismo, se ha aprobado el proyecto Life Osos con futuro, financiado por la UE, para luchar contra las amenazas como el cambio climático y conseguir que los osos tengan alimento en su hábitat y no necesiten buscarlo fuera.
Por otra parte, como el número de senderistas y personas que se acercan a las zonas naturales donde habita el oso pardo es cada vez mayor, también aumenta la posibilidad de encontrarse con uno de ellos en su hábitat. Para evitar problemas, la Fundación Oso Pardo ha creado el siguiente vídeo donde ofrece varios consejos:
¿Sabías que el oso pardo estaba en peligro en España pero que se está recuperando? ¡Cuéntanos qué te parece!
Fotos: Fundación Oso Pardo